MOCHILENADO POR EL PERÚ!
Preparativos:
Un año más, toca elegir el destino de una nueva aventura. Tras barajar distintas opciones (desde Vietnam, pasando por la India, hasta Bolivia), decidimos aparcar nuestro amado Sureste Asiático y probar suerte en el continente americano. Así, este año optamos por Latinoamérica, nos vamos al Perú!!!!!
Perú, tierra de incas, es un país que alberga grandes contrastes, desde la Cordillera Blanca, pasando por la selva amazónica hasta descubrir el desierto de Atacama, compartido con el vecino Chile. Hasta que no indagamos sobre qué podíamos hacer en este país, no nos dimos cuenta de que realmente es un viaje muy completo. Perú no solamente es MachuPicchu; la gente, los paisajes, la comida, la historia de este país es apasionante.
A nivel práctico, Perú es un país relativamente económico para viajar como mochilero/a. No es el Sudeste Asiático, pero dentro de Lationamérica puede ser un buen destino para mochilear. Las conexiones entre las distintas partes del país son buenas; es un país preparado para el turismo. Hay varias compañías de buses (para todos los bolsillos) y compañías aéreas económicas. Nosotros optamos por viajar de noche -en buses nocturnos- para no perder tiempo desplazándonos, y la experiencia fue muy buena. Dado el poco tiempo que teníamos y el itinerario que habíamos planteado, tomamos un avión interno desde Lima hasta Cusco, ya que en bus es demasiado tiempo (más de 20 horas). Además, nosotros utilizamos el transporte nacional, "la combi" (buses txikitos), que resulta ser muy barata y práctica para moverse de un pueblo a otro y para mimetizarse con la gente local.
Este año volamos con American Airlines, ya que era la opción más económica y con unas escalas más que aceptables. El trato no es tan agradable como con otras compañías en las que hemos volado, pero no está mal.
Datos prácticos:
- Acceso a internet: en cualquier alojamiento y también en algunos restaurantes hay wifi. También hay numerosos cibers con ordenadores para imprimir en casi todos los pueblos y ciudades que hemos visitado.
- Dinero: la moneda es el nuevo sol. También le dicen lucas o mangos.
1 dólar=3,28 soles.
- Hora local: diferencia con el Estado Español de 7 horas.
- Lavabos públicos: normalmente fáciles de encontrar. Suelen cobrar 50 céntimos de sol o 1 sol por utilizarlos.
- Seguridad: un tema controvertido. Hemos oído de todo, sobre todo en Lima. Hay determinados barrios un tanto más conflictivos, según nos dijeron, que es conveniente evitar. Por lo demás, como en todos los sitios, hay que tener precaución y sentido común.
-Presupuesto: al final del blog voy a poner el presupuesto detallado, con las medias de todos los días y cuál es el valor de las distintas cosas en Perú, para que toméis una referencia.
ITINERARIO
Nosotros diseñamos un itinerario adecuado a los días que teníamos para disfrutar del país (un total de 19 (17 completos, que luego, por problemas, fueron alguno menos).
Este fue nuestro itinerario:
Día 1 (16 de Junio): Vuelo Madrid-Lima
Día 2 (17 de Junio): Lima-bus nocturno a Huaraz
Día 3 (18 de Junio): Huaraz-Rataquenua
Día 4 (19 de Junio): Huaraz-Laguna Churup
Día 5 (20 de Junio): Huaraz-Laguna Chinancocha-Laguna 69-bus nocturno a Lima
Día 6 (21 de Junio): Vuelo fallido a Cusco
Día 7 (22 de Junio): Vuelo Lima-Cusco-Freetour por la ciudad
Día 8 (23 de Junio): Cusco-Písaq-Sacsahyuaman
Día 9 (24 de Junio): Cusco-Inti Raimi
Día 10 (25 de Junio): Cusco-Ollantaytambo-Aguas Calientes
Día 11 (26 de Junio): Aguas Calientes-MacchuPicchu-Cusco
Día 12 (27 de Junio): Cusco-bus nocturno a Arequipa
Día 13 (28 de Junio): Arequipa
Día 14 (29 de Junio): Arequipa-Chivay
Día 15 (30 de Junio): Chivay-Cañón del Colca-Arequipa-bus nocturno a Ica
Día 16 (1 de Julio): Ica-Huacachina
Día 17 (2 de Julio): Ica-Islas Ballestas-Reserva Nacional de Paracas
Día 18 (3 de Julio): Ica-Lima
Día 19 (4 de Julio): Lima-Madrid
*Sin más dilación, vamos con el diario del viaje día por día. A la aventura!!!
DÍA 1-VUELO MADRID-LIMA
A las 5:30 a.m. salimos desde casa rumbo a Madrid en coche. Después de 4 horas 30 minutos, aparcamos el coche y caminamos para coger el cercanías hacia el aeropuerto. Salimos de la terminal T4S a las 13:00h rumbo a Miami, primera y única escala del viaje. Tras 8 horas y media aterrizamos en Miami con poco tiempo para tomar el siguiente vuelo que nos llevará a Lima. En Miami hay que introducir tus datos en unas máquinas y el tícket impreso hay que llevarlo al puesto de control.
Después de 6 horas más, aterrizamos en Lima a las 00:30h de la noche, cambiamos unos cuantos soles en el aeropuerto y tomamos un taxi hacia el barrio de Miraflores donde tenemos una reserva hecha en el hostel Che Lagarto, muy recomendable, por cierto.
Lo de tomar o no tomar un taxi, pues es relativo. Yo no recomendaría a nadie andar por el barrio de El Callao, donde está el aeropuerto, porque según tengo entendido es bastante peligroso, pero cada cual tiene que decidir. A nosotros la broma nos costó 20 dólares, pero no hubo manera de rebajarlo, y dado que era muy tarde y estábamos bien cansados, los taxistas se aprovecharon y nos cobraron a doblón.
Desde el aeropuerto, sin tráfico, hay como 25 minutos hasta el barrio de Miraflores. Avisamos a las familias de que ya hemos llegado y nos vamos directos a dormir.
DÍA 2-LIMA
A las 7:00h amanecemos, nos damos una ducha merecida y desayunamos tranquilamente en el hostel, ya que está incluido en el precio de la habitación. A las 10:00h, salimos con un mapa y vamos a hacer el Free Walking Tour de la ciudad. Nos juntamos un grupo de unas 10 personas y tomamos un bus tipo C desde "Ricardo Palma" hasta "Jirón de la Unión" (centro de Lima). Allí vemos la Plaza de Armas justo con el cambio de guardia matinal, la catedral, la municipalidad, alguna iglesia, las Catacumbas, el Museo del Cacao y del Pisco. El tour dura unas 3h aproximadamente y puedes darle al guía lo que tú quieras o no darle, es voluntario.
Una vez terminado el tour, nos vamos a comer a uno de los numerosos restaurantes locales que hay en Lima. El primer contacto con la gastronomía peruana es muy bueno; ese día nos enteramos de qué era la chicha!!
Después de comer paseamos un poco por el centro de la ciudad y regresamos al hostel, ya que es allí donde tenemos las mochilas guardadas. Los chicos del hostel nos permiten quedarnos en la sala común hasta que llegue la hora en la que tomamos el bus rumbo a Huaraz.
A una hora prudente, nos dirigimos a la Calle Aramburu, a la estación de Oltursa, que está también en el barrio de Miraflores. En principio el bus lo teníamos reservado para las 23:15h, pero resultó que salió un poco antes. Para viajar con Oltursa, tienes que estar en la estación como mínimo 30 minutos antes de que salga tu bus, porque muchos de sus buses son de itinerancia, por lo que pueden venir un poco antes o un poco después de tu hora (normalmente son puntuales como un clavo).
Nada más entrar al bus flipamos; asientos con mucho espacio, reclinables 180º, con reposapiés, cómodos, increíble!! Teníamos miedo de no dormir en los buses, pero en estos es imposible no dormir!!
Además de la comodidad, en los buses nocturnos de Oltursa te dan de cenar y de desayunar; te ofrecen manta y almohada.
El viaje a Huaraz duró unas 8 horas, pasando por una carretera con muchas curvas. Hay que tener en cuenta que Lima está a 0 metros sobre el nivel del mar (msnm a partir de ahora), y Huaraz está a 3300 aprox., así que es un denivel más que interesante en pocas horas. El mal de altura no suele ser común en este trayecto, porque subes en bus.
DÍA 3- HUARAZ-CRUZ DE RATAQUENUA.TREKKING CAÑÓN
A las 7:00 a.m. llegamos a la estación de Huaraz, cogemos las mochilas previamente facturadas y nos vamos en busca de un hostel para pasar las próximas 2 noches. Vemos un par que no nos convencen y al final nos quedamos en el hostel Andescamp (os dejo el enlace):
http://www.andescamplodge.com/
Es un hostel aceptable, con habitaciones compartidas o individuales, normalmente con baño común. La zona común es principalmente una habitación poco espaciosa con unos sillones, dos mesas y sillas, en la que hay una cocina que siempre está repleta de gente.Hace un poquito de frío dentro.
No había mucha disponibilidad cuando llegamos, así que tuvimos que esperar un poquito a ver si se liberaba alguna habitación. Al principio pensamos en quedarnos en compartida, pero el dueño nos ofreción una habitación con dos camas individuales (litera) para los dos por 40 soles, y aceptamos.
La cama en habitación compartida creo que está en 18 soles por cabeza.
El desayuno está incluido en el precio, y está muy bien; consiste en un creppe relleno de manjar blanco con plátano y chocolate, pan con mantequilla y mermelada y un té o infusión.
Después de dejar las mochilas y cambiarnos de ropa, nos vamos al mercado local que está a 100 metros del hostel (solo sábados y domingos creo), y compramos algo para cocinar más tarde y para llevar a la excursión de hoy.
El dueño del hostel nos recomienda, dado que ya es tarde y es nuestro primer día en altura, que hagamos un mini-trekking para adaptarnos a la altura y aprovechar el día. Así, nos propone ir hasta la Cruz de Rataquenua, un mirador que está a lo alto de la ciudad, y donde se comienza un paseo rodeando un cañón que dura unas 4 horas.
Nos recomienda tomar un taxi hasta la Cruz, porque está algo alejada. Por 10 soles un taxi nos deja en la misma Cruz, a partir de la cual comenzamos a andar. Únicamente hay que seguir el sendero y, cuando éste se aparta, tomar un mini-sendero más enfilado hacia abajo, que en poco rato te deja de nuevo en la ciudad. El calor aprieta durante las horas de sol en Huaraz, así que, a pesar de ser un paseo, nos cansamos un poco.
No es nada espectacular, pero el paseo resulta bonito y nos sirve para ir aclimatando para la excursión de mañana.
Después de la caminata, vamos de nuevo al hostel a ducharnos y a comer algo. Descansamos un rato y salimos por Huaraz a dar una vuelta y hacer alguna compra (pan, queso, agua).
Por la noche cenamos una riquísima tortilla de patata preparada por Ander, y conversamos con la gente que está alojada en el hostel. Sobre las 21:00h nos metemos en la cama a descanar que mañana tendremos un día duro.
DÍA 4-HUARAZ-LAGUNA CHURUP
El despertador nos levanta a las 6:30 a.m. con las pilas cargadas para aguantar el trekking hacia la Laguna Churup. Tomamos la primera combi (10 soles por persona) que sale de la estación de buses de Huaraz rumbo a Llupa a las 7:30h.
Como en la combi vamos 6 personas que queremos ir a la Laguna, el chófer nos sube hasta el pueblo de Pitec. La condición es estar más de 4 personas para ir a Churup, si no, toca caminar desde Llupa alrededor de una hora hasta Pitec, el inicio del trek.
Dado que la caminata es dura y la ruta conlleva unos 600 metros de desnivel (desde Pitec), se agradece poder ahorrar este rato de andar.
Al llegar al inicio de la ruta (un punto desde el cual puedes encaminarte hacia distintos enclaves), hay que pagar el ingreso al Parque Nacional Huascarán.
Como nosotros sólamente vamos a hacer la Laguna Churup, pagamos la entrada normal (Adultos= 10 soles). La gente que va a acampar, o piensa hacer algunas otras ascensiones, debe pagar la tarifa diferenciada de aventura (65 soles), con la que tienes acceso al parque por 21 días.
La última combi para Huaraz pasa por Pitec a las 15:00 p.m.; si la pierdes o quieres ir más despacio en la ascensión, puedes tomar la última desde Llupa, que sale a las 17:00 p.m.
Con la intención de tomar la última combi desde Pitec, salimos con calma para arriba.
La primera parte tiene pendiente, después llanea durante un rato y el último tramo es muy pico, teniendo que trepar los últimos 80 metros, en un repecho de roca que está "equipado" con unas siergas para mayor seguridad.
Hay que tener cuidado en este último paso, pero no es peligroso si se hace con calma y cuidado.
El sendero no tiene ninguna pérdida y, además, hay bastante gente subiendo, por lo que es prácticamente imposible perderse.
A la izquierda de esta siguiente foto vemos el último repechito en el que hay que trepar; se sube por el lado izquierdo y para mí es el tramo más interesante y divertido!!
Detrás queda ya la Laguna Churup.
Tras el repecho, hay que caminar unos 15-20 minutos y te encuentras de bruces con la bonita laguna. Una maravilla para los ojos y para los sentidos!!!
No puedo dejar de recordar que se alcanza una altitud de 4.450 m.s.n.m., por lo que, si no se está aclimatado/a, cabe la posibilidad alta de sufrir mal de altura. A cada cual le afecta de distinta manera, y los síntomas de una persona a otra varían, pero suele ser cansancio, falta de oxígeno, pulsaciones aceleradas, vómitos, etc.
Yo lo sufrí, vomitando 4 veces durante la ruta. A mayor altitud, peor te sientes. Si tienes la desgracia de que te pasa, es importante hidratarte bien y bajar rápido.
La Laguna es espectacular y el trekking merece mucho la pena; el paisaje es precioso. La duración es variable dependiendo de las condiciones en las que te encuentres. Nosotros decidimos hacerlo sin prisa, haciendo pequeñas paradas constantes para recuperar. Nos costó en total 3 horas 45 minutos (2h 45 minutos la subida y 1 hora 30 minutos la bajada).
Tomamos la combi sobre las 14:50 horas, y en 1 hora 30 minutos aproximadamente llegábamos a Huaraz.
Compramos una pastilla para el soroche, ya que me sigo encontrando mal, y hago verdaderos esfuerzos por comer algo. En media hora me encuentro mucho mejor.
El resto del día lo pasamos descansando, saliendo a dar una vuelta por la ciudad.
DÍA 5-HUARAZ-LAGUNA CHINANCOCHA-LAGUNA 69
Como en el trekking de ayer la altura me ha afectado más de la cuenta, decidimos entre los dos que no es conveniente que me vuelva a poner a 4.600 msnm porque no sé cómo me va a responder el cuerpo. Así pues, Ander parte a las 5:00 a.m. desde el hostel para hacer el trekking a la Laguna 69, y yo (un poco fastidiada por no poder ir a 69), decido hacer algo más suave. Mi idea principal es aprovechar para ir a ver las ruinas preincas de Chavín de Huantar, pero justamente el parque arqueológico cierra los lunes, y hoy es LUNES!!!
Contaremos las dos excursiones por separado, para que tengáis referencia de las dos.
Edurne-Laguna Chinancocha
Así pues, el del hostel me ofrece hacer algo de escalada o subir a un glaciar a 5000 m o hacer el tour a la Laguna Chinancocha o Llanganuco. Opto por lo último, porque para las otras dos opciones no creo que tenga cuerpo.
A las 9:20 salgo del hostel bien cargada con caramelos de coca, un mate de coca en la tripa y un sorrochi pill en la mochila por si hace falta. Hoy no me pilla el mal de altura!!! ;)
La combi me pasa a buscar por el hostel, parando en distintos alojamientos para recoger a más gente. Soy la única extranjera entre todo peruanos/as, y eso me encanta!!
No obstante, se aprecia desde el principio que la dinámica de la excurisón es completamente la de un tour, y eso no me hace sentir demasiado cómoda.
El primer pueblo en el que paramos se llamar Carhuaz (más conocido como borrachera). Allín nos dejan unos 20 minutos para que probemos distintos helados típicos de la zona. Yo paso de helado y camino dando una vuelta por el pueblo aprovechando para sacar algunas fotillos.
Cumplido el rato, subimos de nuevo a la combi y nos dirigimos hacia la ciudad sepultada de Yungay. En el año 1933, un terremoto de 7,6º en la escala Richter provocó que el monte Huascarán se resquebrajara, ocasionando una inmensa avalancha que arrasó la ciudad y mató a 25.000 personas.
Visitamos el cementerio (5 soles) y los restos de la ciudad. El guía nos va informando sobre los montes que componen la Cordillera Blanca y la Negra. Después de una hora allí, montamos de nuevo en la combi hacia la Laguna Llanganuco. El camino es incómodo, pasando por puentes de madera en estado muy precario.
En una hora llegamos a la entrada del parque (10 soles) y la temperatura ha descendido al ganar altitud. El paisaje es espectacular; la laguna bellísima.
Es más conocida como Quebrada o Laguna de Llanganuco, pero su nombre real es Laguna Chinancocha; su nombre es una expresión quechua que significa Laguna Hembra.
Este enclave está encajado literalmente en un estrecho valle glaciar, entre los nevados Huascarán y Huandoy. Es parte del trekking que va hacia la Laguna 69, y más arriba hay todavía 3 lagunas más (imagino que a cada cual más hermosa).
Se puede dar un paseo en barca de 20 minutos por 5 soles. Puede parecer un poco turistada, pero relamente merece la pena hacerlo, ya que la vista desde dentro de la laguna es impresionante; rodeada de pura montaña!
Después de una hora en la Laguna (llevad algo de ropa porque realmente hacia fresco), montamos en la combi durante hora y media aproximadamente hasta Caraz, un pueblito que pilla en el camino de vuelta hacia Huaraz.
Allí nos tienen preparada la encerrona de llevarnos a un restaurante carísimo, apartado del pueblo, así que no tienes alternativa para comer en otro lugar algo más económico.
Después de comer volvemos para Huaraz haciendo dos paradas; una en una tienda de manjar blanco, y la otra en una tienda de artesanías.
Como veis, un tour con todas las letras; a pesar de ello, han sido interesantes los lugares que hemos visitado y las historias que nos ha contado el guía.
Ander: Laguna 69
A las 5:00 a.m. estoy listo en la puerta del hostal para emprender la marcha hacia 69. La ruta alcanza los 4.600 msnm, con un desnivel de 750 metros.
En esta ocasión, y a diferencia de Churup, hacemos la salida en tour desde el hostal ya que 69 no se puede hacer por libre (o normalmente no se hace por libre). En principio nos comenta el guía que debemos hacer viaje de 3 horas hacia el punto de partida del trek y 3 horas de vuelta. Bien, pues esto no es del todo cierto y os lo explico. A las 5 tomamos el bus y hasta las 6 no salimos relamente de Huaraz, ya que el chófer se dedica a recoger a todas las personas por sus respectivos alojamientos. A las 6:00 comenzamos el viaje, pero paramos a las 8:00 para desayunar (sitio bastante caro y en el que estamos un hora). Después, paramos en la Laguna Chinancocha para hacer un par de fotos y seguimos el trayecto en bus. A las 10:00 (después de 5 horas), comenzamos el trekking. Hay que decir que tanto el último tramo de bus como el inicio de la caminata es muy bonito, ya que se pasa entre dos laderas de puedra muy cortadas.
Al comenzar a andar, transcurrimos unos 45 minutos prácticamente llaneando, entre prados y vacas, lo cual se hace muy agradable. Una vez pasado este tramo, comenzamos lo que es la ascensión.
Se pasa por un camino zigzagueante que no se empina en exceso y resulta bastante llevadero ya que lo subimos con calma. Una vez transcurridas aproximadamente las dos horas de caminata, llegamos a una pequeña laguna desde la que se puede comenzar a ver el punto final del trek.
La laguna pequeña viene acompañada de un gran prado que tenemos que cruzar y nos permite relajar un poco las piernas. Al final, llegamos al último tramo, que nos demora otros 45 minutos y se trata del más exigente de la caminata por el cansancio acumulado, porque el camino se empina y ante todo por la altitud que hemos ido alcanzando.
Después de 3 horas, llegamos a la Laguna 69, y todo el cansancio de pronto merece la pena; increíble espectáculo el que tenemos delante de nuestros ojos!!
Aprovecho para sacar unas fotos (que salen peor de lo que me esperaba) de este precioso paisaje, con aguas turquesas y glaciares de fondo.
Como un poco y para abajo. Me he sentido muy bien durante toda la subida, pero ya arriba empiezo con dolor de cabeza por la altitud, por lo que, siguiendo el consejo que le dio el guía ayer a Edurne en Churup, bajo rápido sin parar y, en 1 hora 45 minutos llego abajo con un dolor de cabeza importante. Me tomo una pastilla y conforme vamos descendiendo con el bus, se me pasa del todo.
En mi opinión, excursión indispensable en caso de ir a Huaraz; no es complicada si se tiene algo de costumbre de hacer ejercicio. Eso sí, cuidado con la aclimatación ys que este es el gran problema que puede surgir en este trekking y en general en cualquiera que se haga cerca de la Cordillera Blanca.
A eso de las 20:00 nos reencontramos en el hostal, cogemos las mochilas y nos vamos a un ciber a hacer el chekking del vuelo de mañana a Cusco. Cenamos algo y nos vamos para la estación de buses, donde tomamos un bus que sale puntual hacia Lima.
DÍA 6: LIMA-VUELO FALLIDO A CUSCO
A las 6:00 a.m. llegamos a la estación de buses de Oltursa en Lima, desayunamos algo y nos vamos a tomar un bus hacia el aeropuerto. Hay muchísimo tráfico y el bus tarda demasiado, por lo que nos vemos obligados a coger un taxi (50 soles, una hora de trayecto por el tráfico insoportable que había).
Llegamos al aeropuerto, hacemos los trámites y esperamos a embarcar. Con un poco de retraso embarcamos, pero el avión no se mueve en 40 minutos. Como ya viene siendo habitual en nuestros viajes, otro año más mala suerte con los vuelos internos.
Nos comunican que ha habido un incidente con un avión (se ha salido de pista y no lo pueden retirar) y cierran el aeropuerto de Lima hasta, por lo menos, las 17:30 horas. LCPeru (ni la mayoría de compañías aéreas internas) no vuela de noche, y además parece ser que en Cusco también tienen algún proble, por lo que nos reprograman el vuelo para las 5:00 a.m. de la mañana siguiente. Bueno, podría ser peor, los de StarPeru no vuelan hasta las 15:00 p.m. del día siguiente, qué horror!
Pasamos noche en el aeropuerto como buenamente podemos.
DÍA 7: LIMA-CUSCO
A las 5:00 a.m. esta vez sí salimos puntuales del aeropuerto camino a Cusco. Tras un desayuno discreto en una hora nos presentamos en la vieja capital inca.
A la llegada nos abordan los típicos taxistas, pero tras preguntar en el aeropuerto, nos confirman que existe transporte público con dirección a la Plaza de Armas.
Menudo viajecito... el bus petao de gente y nosotros con las mochilas grandes. El agobio es bastante severo.
Alrededor de la plaza vemos que hay mucha guest house, pero todas fuera de nuestro presupuesto. Indagamos y nos topamos con un hostel en la Calle Meloq (a 5 minutos de la Plaza) que se ajusta a nuestro presupuesto y que está realmente bien.
Tras una ducha bien necesaria de agua caliente que nos sabe a gloria, decidimos invertir el día en conocer la ciudad, que ya desde el primer momento nos da muy buena honda.
A las 11:30 salimos del hostal al yacimiento arqueológico inca de Qorikancha. Se ubica en la plazoleta de Santo Domingo en el actual recinto del templo y convento de Santo Domingo y se extiende hasta la avenida del Sol.
Según la concepción inca, el Qorikancha fue el centro relgioso del Cusco, centro geográfico y político. Este templo era el lugar donde se rendía adoración al máximo dios Inca, "Inti" (sol), pero (como no) los españoles se apropiaron de el templo y, sobre sus restos, construyeron el Convento de Santo Domingo.
El lugar estaba compuesto de distintas estancias dedicadas a las distintas deidades incas: el templo del Sol (el más importante), el de la Luna, el de Venus y las Estrellas, el de Chuko Illapa (rayo, relámpago y trueno), el del Arco Iris y el jardín solar.
En la actualidad sólo quedan algunos restos de todo este complejo, que se entremezcla con estancias repletas de cuadros relacionados con el cristianismo.
Nos pareció una visita interesante, obligada si visitáis Cusco. En la puerta del mismo templo, hay guías que ofrecen sus servicios (30 soles), pero la verdad es que hay muchos paneles informativos en todo el templo, y es posible enterarte bien del funcionamiento y el propósito del templo inca, así como del proceso de conquista y expolio del imperio español.
A la salida de Qorikancha, en la Avenida del Sol y la Plaza de Armas, pudimos ver la celebración de la festividad del día del Cusco, fiesta que se festeja cada año hasta el colofón final, el 24 de Junio (solsticio de invierno en el hemisferio sur), con la gran fiesta del Inti Raymi.
A lo largo de estas calles y durante todo el día, desfilan distintos distritos con sus trajes típicos y realizando bailes folclóricos. Es muy curioso y bonito de ver.
Después de comer, volvemos a la Plaza de Armas donde, por pura casualidad, nos encontramos con el Free Walking Tour (15:00h) y sin dudarlo nos unimos al grupo.
El tour dura unas dos horas, en las cuales el guía te enseña los lugares claves de Cusco y repasa la historia inca de la ciudad antes de la conquista española.
Después de la parte más histórica, te llevan a una tienda de prendas elaboradas con lana de alpaca (que, por cierto, la tiendita no es nada cara comparada con el resto de las que hay en Cusco), también paramos en el taller de un luthier de instrumentos peruanos, con demostración incluida y explicación de diferentes tipos de instrumentos de la cultura peruana. Por último y para terminar el tour, vamos a un bar-restaurante, donde nos cuentan la historia del pisco y nos dan pisco-souer a cada uno/a (lo preparan muy bien en este bar, el mejor que probamos en todo el viaje a Perú).
Esta última parte de visitar comercios es la que menos gracia nos hace, pero en ningún momento te sientes comprometido/a a comprar nada si no quieres.
En nuestra opinión, el free tour es una actividad imprescindible en casi cualquier ciudad, pero en Cusco no hay dudas.
DÍA 8: CUSCO-RUINAS DE PÍSAQ-RUINAS DE SAQSAHYUAMAN
Hoy aprovechamos para dormir un poco más de la cuenta, ya que llevábamos dos días sin dormir en una cama!! La verdad es que, entre desayunar y organizar el día, se nos hace un poco tarde. Al fin y, gracias a los certeros consejos de nuestro recién conocido y amigo Neftalí (no sé que hubiéramos hecho sin tus orientaciones...), decidimos comprar el boleto turístico completo del Valle Sagrado.
*Aquí hago un inciso para explicar este tema:
Hasta hace 4 años, tú podías visitar los distintos enclaves del Valle Sagrado por separado, yendo a los que creías conveniente y pagando la entrada allí mismo. Bien, desde 2012 esto no es posible. Alguien en el gobierno peruano ha tenido la espabilada idea de sacar dos tipos de boletos turísticos para ver el Valle Sagrado:
a) Boleto turístico parcial (70 soles para extranjeros): te permite visitar Saqsayhuaman, Qenqo, Tambomachay, Puka Pukara y Moray (si mal no recuerdo)
b) Boleto turístico del Cusco integral (130 soles para extranjeros): te permite visitar Pisac, Ollantaytambo, Chinchero, Moray, Tambomachay, Pukapukara, Qenqo, Saqsayhuaman, Pikillacta, Tipón y 4 museos en la ciudad del Cusco.
Es un poco faena, porque si solamente quieres visitar, digamos por ejemplo, Písaq, tienes que pagar el boleto integral; no existe la manera de pagar individualmente cada yacimiento arqueológico.
*Aquí hacemos otro inciso para explicar que existen distintas maneras de visitar el Valle Sagrado:
a) Por libre, que es la opción que nosotros escogimos.
b) Por agencia mediante City Tour: se visitan los centros religiosos ancestral y coloniales, como grupos arqueológicos cercanos a la ciudad (Catedral, Qorikancha, Saqsahyuaman, Qenqo, Pucapucara y Tambomachay). Incluye el transporte y el guía; las entradas y las comidas las paga cada uno/a. Sale cada día a las 13:30 y dura hasta las 18:30h.
c) Por agencia mediante el Tour del Sacred Valley o Valle Sagrado (todos los días de 8:00 a 19:00h): se visitan Pisaq, Urubamba, Ollantaytambo y Chinchero. Incluye el transporte y el guía; las entradas y las comidas las paga cada uno/a.
Muchísima gente hace la visita en tour, pero también hay personas que lo hacen por libre (las menos).
Una vez comprado el boleto (se compra en la Municipalidad del Cusco, Avda. del Sol), nuestro plan para hoy es visitar Písaq a fondo y, si se puede, pasar a la vuelta por las ruinas de Saqsayhuaman.
Cogemos un taxi hasta la parada donde se toma el bus (en la Urbanización Tahuantisuyo, enfrente del Colegio Garcilaso de la Vega) por 3,50 soles y tomamos una combi dirección Písaq por 4 soles cada uno. El trayecto es muy chulo, se divisa el Valle Sagrado, el paisaje espectacular.
Tardamos aproximadamente una hora en llegar a Písaq (33 km). La combi te deja en el centro del pueblo.
Lo primero que observamos es que es un pueblo muy bohemio, con mucha gente hippie por las calles, muy chulo.
Damos una vuelta por el mercado, que es inmenso, todo lleno de artesanías típicas peruanas. También pasamos por el Mercado de Abastos de Písaq a comprar algo de pan, fruta y queso para almorzar, ya que es un poco tarde y si subimos a las ruinas nos va a dar la hora de la comida.
Neftalí nos había dicho que subir en taxi o mototaxi desde el pueblo a las ruinas no debía costarnos más de 8 soles, pero nos piden 25 por los dos. Así que esperamos un poquito a ver si viene alguien y podemos compartir el transporte. Al poco tiempo, se unen a nosotros tres chilenos muy majos, acordando pagar 6 soles cada uno por el trayecto. Desde Písaq hasta las ruinas (aunque se ven cerca y parece que lo están) hay unos 13 kilómetros. Existe la posibilidad de subir caminando o subir en combi 6,5 km (a partir de allí, la combi toma otra dirección y tienes que caminar otros 6,5 km hasta las ruinas). Antes de llegar a las ruinas, hay un control en el que te piden el boleto turístico y, si no lo tienes, debes comprarlo. La carretera está infestada de combis turísticas (tours).
Las ruinas (3.400 msnm) son sencillamente espectaculares y tienen unas magníficas vistas del valle. Si se tiene ocasión de contratar un guía allí mismo, creemos que tiene que merecer mucho la pena. Nosotros no encontramos ningún guía, pero teníamos información sobre Písaq impresa, así que lo leímos todo mientras descubríamos las ruinas. No es lo mismo que oír la explicación de un guía, pero no tuvimos opción.
Las ruinas de Písaq están apostadas en lo alto de una colina, a la espalda del pueblo. Está constituido por agrupamientos de restos arqueológicos entre los cuales destacan andenes, acueductos, caminos asociados a murallas y portadas.
Nosotros, siguiendo el consejo de Nefatlí, teníamos intención de caminar por el sendero, haciendo una circular y bajando de nuevo al pueblo, pero no pudimos hacerlo porque el sendero estaba cerrado debido a las intensas lluvias que habían generado desprendimientos.
Si tenéis ocasión de poder recorrer este sendero, tenemos entendido que merece mucho la pena.
Para bajar de nuevo al pueblo hay tres opciones:
a) Caminar hasta el pueblo (13 km-1h30´aprox.)
b) Tomar un taxi desde arriba (25 soles)
c) Tomar una combi hasta Písaq (hay que bajar unos 40 minutos andando hasta un cruce, y ahí se toma la combi).
Nuestra intención era bajar andando, así que nos pusimos a ello. Pero el tiempo se nos echaba encima y todavía queríamos ir a Saksahyuaman, así que anduvimos los 40 minutos hasta el cruce y tomamos una combi hasta Písaq (1 sol).
Ya en Písaq y sin perder ni un minuto, tomamos una combi dirección Cusco (4 soles) diciéndole al chófer que queríamos bajarnos en Saksahyuaman.
Una hora después llegábamos a las ruinas de Saksahyuaman, justo para el atardecer. Solo teníamos unos 45 minutos antes de que anocheciera, así que nos dimos prisa en visitarlo, sabiendo que mañana íbamos a volver para ver el Inti Raymi.
Tras leer la información que traíamos impresa sobre las ruinas y cerciorarnos de la importancia histórica del lugar, recorrimos su estructura, o lo que queda de ella.
El parque arqueológico de Saksayhuaman está ubicado a 3 km al norte de la ciudad del Cusco y es un complejo de ruinas megalíticas situadas en lo alto de una colina. Los historiadores de la conquista española le atribuyen fines militares, que luego pasaron a convertirse en religiosos y, finalmente, en lugar de trabajo. Las murallas están formadas por enormes bloques de piedras que pueden alcanzar hasta 9 metros de altura. La unión de las piedras, como es habitual en la arquitectura inca, no precisa de argamasa, si no que están ensambladas perfectamente.
Se nos hizo prácticamente de noche, por lo que decidimos tomar un taxi para bajar hasta la Plaza de Armas de Cusco. Para terminar el día, decidimos ir al bonito barrio de San Blas, dar una vuelta y cenar por allí.
DÍA 9- CUSCO-INTI RAYMI
24 de Junio, Solsticio de Invierno. Gran día en la cultura andina. Los incas celebrarban en Cusco la mayor festividad del año, la dedicada al más venerado dios inca, "Taita Inti" o "Dios Sol".
El Inti Raymi también era celebrado en otros lugares del imperio inca, manteniéndose en la actualidad distintas ceremonias en puntos claves del Perú, como Cusco, Ruinas de Chavín De Huantar en Huaraz, etc.
Desde hace más de 60 años, todos los 24 de Junio se realiza una escenificación de lo que era el Inti Raymi en tiempos de los incas. Dicho día se celebra en los escenarios históricos y naturales que habitualmente se utilizan para la escenificación:
- El Qorikancha (cerco de oro): en la época incaica era el principal templo consagrado al Sol.
- La Plaza de Armas: durante el incanato, en esta inmensa plaza se desarrollaba íntegramente la ceremonia en medio del gran ushnu o plataforma ceremonial.
- Saksayhuaman (voz que deriva de los términos quechuas "saksay" y "waman" que traducido al español significa "sáciate halcón").
Durante los días anteriores en el Cusco, nos han recomendado quedarnos para ver la celebración del Inti Raymi, para lo cual es condición indispensable MADRUGAR y acudir a la tercera y más importante de las etapas en Saksa. Para poder ver la fiesta con cierta calidad hay que madrugar para coger sitio bueno en el pequeño cerro que hay justo al lado de las ruinas. O... también existe la posibilidad de pagar 160 dólares y verlo en el graderío que colocan en la zona del escenario.
Nosotros preferimos lo que hacen los peruanos, así que a las 8:00 puntuales vamos a la Plaza San Francisco para coger uno de los muchos buses que pone la Municipalidad del Cusco para que la gente pueda subir a ver el espectáculo (concretamente salen cada 5 minutos).
Para las 9:00 ya estamos sentados guardando sitio al lado de muchos/as peruanos/as que también han madrugado por la misma razón. En un principio, el espectáculo está previsto (según nos dicen) para las 12:00 del mediodía, pero hasta las 13:40 no empieza. Tampoco nos importa demasiado, porque el lugar se va llenando de gente y cogiendo un ambientico muy especial. Además, aprovechamos el rato para hablar con los peruanos que tenemos al lado sobre el país, la política, los incas, etc. Fue una de las mañanas más bonitas que pasamos en el Perú.
El lugar se va abarrotando por momentos, hasta el punto de que casi ni puedes andar sin pisar a la gente. Continuamente pasan vendedores de toda clase de productos, sobre todo de comida y bebida, que en esos momentos no nos viene nada mal!
A las 13:40, por tanto, comienza el espectáculo y nos dejamos llevar por la euforia y el buen ambiente que se respira. A disfrutar!!
En la escenificación del acto, se van desarrollando distintos aspectos, como la escenificación ceremonial, informe de los cuatro Suyus o Regiones (Qoyasullu, Kuntisuyu, Antisuyu y Chinchaysuyu), el rito de la chicha, rito del fuego sagrado, sacrificio de la llama y augurios (no se la sacrifica realmente, si no que se le aplica un calmante para dormirla) , rito del Sankhu o pan sagrado, Q´ochurikuy (estallido de exaltación popular).
Fueron varias las razones que impulsaron
a la civilización Inka a realizar los sacrificios y ofrendas al astro
rey. Una fue que el Inka, al igual que la nobleza cusqueña, eran
considerados hijos naturales del Sol; a él obedecían su existencia, y
debían corresponderle con sacrificios y ofrendas. Por otro lado, si la
cosecha del maíz fue buena, había que agradecerle y si fue mala, había
que rogarle para que el año venidero les compense con una buena
producción.
En junio (solsticio de invierno)
El sol iba alejando, el frio aumentaba, en los amaneceres el agua
estaba escarchada, por tanto, había que pedirle al Sol que volviera, que
al rayar los crepúsculos matutinos no siguieran avanzando hacia el
norte. Finalmente, había que testimoniarle al dios Inti, la eternidad y
total entrega de sus hijos, con sumisión y respeto.
Hace más de seis siglos,
el Inka Pachakuteq instituyó la Fiesta al dios Sol. Los Cusqueños
actualmente siguen representando el Inti Raymi con el mismo fervor con
el que sus ancestros lo realizaban en las esplendorosas épocas del
incanato.
El Inti Raymi, en su
versión contemporánea se realiza desde el 24 de Junio de 1944, cuando
fueron instituidas las fiestas de la ciudad en recuerdo a su milenario
origen y cuna de la Gran Civilización Inka.
Si tenéis la ocasión de poder ver el Inti Raymi, hacedlo; es un día muy especial en el Perú y todavía más en Cusco, antigua capital Inca.
Con mucha pena, al finalizar el acto nos despedimos de los amigos con los que habíamos compartido el día, y echamos a andar hacia el pueblo. En media hora estábamos en la Plaza de Armas.
DÍA 10: CUSCO-MARAS-MORAY-OLLANTAYTAMBO-AGUAS CALIENTES
Hoy toca día potente, así que el despertador suena a las 6:15, una ducha, un buen desayuno en el hostal, y en marcha. Este día decidimos invertirlo en ir hacia Aguas Calientes, parando en aquellas ruinas incas que nos venían de paso en dicho camino.
Así pues, tomamos una combi dirección a Urubamba, pidiéndole al chófer que nos parara en el cruce para ir a Maras. En 45 minutos salíamos de la combi, cogiendo un taxi (1 sol) al pueblo de Maras. El primer problema que nos encontramos es que no hay combis para visitar estos dos enclaves, por lo que todos los taxis que pasan, te ofrecen llevarte por una cantidad desorbitada en Perú. Tuvimos la suerte de encontrar a una pareja francesa con la que pudimos compartir el taxi para visitar estos dos sitios.
La primera parada es Moray, enigmático enclave con impresionantes andenes circulares que parecen huellas digitales gigantes. Se piensa que Moray era utilizada como una especie de laboratorio para la adaptación de plantas a nuevos ambientes climáticos; se trataba de recrear una serie de microclimas en donde sembrar una gran cantidad de cultivos mejorados de manera experimental.
La temperatura del suelo de cada andén determino que los incas lograran desarrollar unas veinte zonas ecológicas en miniatura donde producir granos como la quinua y la kiwicha, así como la calabaza y zapallo y múltiples variedades de papa.
Con el tiempo encima y viendo que todavía teníamos mucho camino por delante, decidimos no ir a Maras, y fue una buena decisión, porque el trayecto a Aguas Calientes iba a ser largo...
Desde el cruce de Maras, tomamos una combi rumbo a Urubamba y nada más bajar en Urubamba, tomamos otra hacia Ollantaytambo. Una vez allí, paramos a comer un poco y sin perder demasiado tiempo, nos adentramos en las famosas ruinas incas del pueblo, que están en el cerro que queda justo al lado del pueblo.
Puesto que Machu Picchu es el atractivo principal del Valle Sagrado, muchas de las ruinas que forman parte del Valle Sagrado son menos frecuentadas y se toman como parte del camino hacia MaPi. Y es una pena, porque Ollantaytambo es una zona arqueológica impresionante que bien merece dedicarle unas horas como mínimo.
Ollantaytambo toma su nombre de Ollantay (general del imperio inca) y tambo (en quechua, lugar de descanso, reposo).
En época de los incas, Ollantaytambo estaba formada por dos zonas: el pueblo, que es donde vivía la gente (el pueblo), y la fortaleza -que conforma la zona arqueológica- donde transcurría la vida religiosa, política, militar y administrativa de todo el pueblo. Esta era la zona más importante y la que estaba destinada a dar residencia al grupo social más alto de la clase inca.
Cualquier persona que observe cualquier construcción inca, se dará cuenta de que éstas están perfectamente adaptadas al entorno en el que están edificadas, en armonía con la naturaleza y respetando el equilibrio natural.
Los incas creían que las montañas tenían espíritu (Apus) y, en vez de romper ese equilibrio natural, construían sus fortalezas adaptando su arquitectura a la forma natural de las montañas.
Ollantaytambo es un ejemplo de ello.
Una vez visitada la fortaleza, volvimos al pueblo con intención de salir cuanto antes hacia Santa María y comenzar el trayecto a Aguas Calientes. Sabíamos que llevábamos el tiempo muy justo, pero teníamos la esperanza de no tener que caminar demasiado tiempo de noche.
Antes de seguir con esta etapa, voy a hacer un inciso para explicar el trayecto hacia Machu Picchu.
Para llegar a Aguas Calientes no hay demasiadas opciones, ya que el pueblo no tiene conexiones terrestres (salvo la ferroviaria): o bien tomas el tren que te lleva directo hasta el pueblo, o haces la ruta alternativa que implica varios trasnportes y una pequeña caminata. También hay muchas personas que hacen el llamado Camino Inca (uno de los muchos que hay) y va caminando desde Cusco hasta Aguas Calientes en una etapa que dura 4 días y 3 noches. No tengo demasiada información sobre esta ruta, pero tengo entendido que se puede hacer por libre o contratada con un guía. La excursión con guía creo recordar que era muy costosa y hay que reservarla con mucha antelación porque está muy demandada.
- La primera opción (tren) es la más cómoda, pero también la menos económica. El tren hacia Aguas Calientes sale desde Cusco (época seca) y desde Ollantaytambo (época lluviosa), y tiene un coste aproximado de 130 dólares (ida y vuelta). La mayoría de gente opta por el tren, pero hemos de decir que cada vez tiene más empuje la ruta alternativa. También hemos de decir que, según nos comentaron los locales, las empresas que gestionan y tienen el monopolio de realizar los viajes a Aguas Calientes, son de propiedad americana (cómo no). Han montado las vías del tren y, si quieres ir, debes pagar el precio que ellos ponen, ya que no existe ningún otro modo de acceder hasta el mismo pueblo. No olvidéis que el trayecto desde Ollantaytambo hasta Aguas Calientes no dura más de 2 horas y el precio es abusivo.
- La segunda opción es mucho más incómoda y engorrosa, pero tiene su encanto y el coste es considerablemente menor que el del pasaje del tren. La ruta tiene varios pasos:
1. Cusco-Ollantaytambo: tomas una combi.
2. Ollantaytambo-Santa María: combi o bus.
3. Santa María-Santa Teresa: jeep
4. Santa Teresa-Hidroeléctrica: taxi o combi.
5. Hidroeléctrica-Aguas Calientes: caminando por las vías del tren.
A pesar de que, como vais a ver a continuación, nosotros lo hicimos paso a paso, tomando distintos transportes, queremos destacar que existe la posibilidad de hacerlo en dos pasos: tomar un bus desde Cusco hasta la Hidro y desde allí caminar por las vías del tren. Nosotros no lo sabíamos, pero ahora las agencias turísticas están ofreciendo este trayecto en bus; también puedes negociar con un taxista y acordar un precio razonable para que te lleve hasta la Hidro.
Una vez explicado esto, sigo con el relato del diario, que muestra cómo hicimos el camino hacia Aguas Calientes por la llamada ruta alternativa.
Una vez visitada la fortaleza, volvemos al pueblo para tomar una combi hacia Santa María. Para ello, preguntamos a los/as locales cómo y dónde tomar la combi, y nos informan de que debemos ir hacia la salida del pueblo, en el cruce entre las vías del tren y la carretera que va hacia Quillabamba.
Tras una hora de espera sin que pase ninguna combi, nos empieza a apretar el tiempo. A las 15:00 pasa una que nos ofrece llevarnos, así que sin dudarlo nos montamos. El camino es incómodo; hay que cruzar un valle, y para ello debemos subir y bajar un montarrón alcanzando los 4200 metros de altitud. La carretera no invita a la tranquilidad: curvas y pendiente más que considerable. El paisaje, una vez más, espectacular; paso radical de paisaje árido a selvático.
Dos horas y media después nos presentamos en Santa María sanos y salvos y, sin perder tiempo (ya es de noche), compramos palta, fruta y pan y tomamos una combi hacia Santa Teresa con duración de una hora.
Una vez en Santa María, los taxistas nos comentan que, al ser de noche, no queda transporte público que vaya hacia la Hidro, por lo que nos nos queda otra que aceptar la tarifa que nos ponen. Tenemos la suerte de poder compartir el viaje con otra pareja chilena que también va para la Hidro.
En media hora nos presentamos en la Central Hidroeléctrica dispuestos a realizar el último tramo para llegar a Aguas Calientes: el camino de dos horas por las vías del tren.
Pese a ser de noche, no hay mayor problema en hacer el trayecto. El tren no circula de noche y el camino es cómodo; únicamente se trata de seguir las vías del tren. Importante llevar una forntal, porque hay algunos pasos en el camino en los que cruzas un pequeño río.
El trayecto empieza en las mismas vías pero, tras caminar unos 200 metros, éstas se acaban y hay que coger un sendero marcado en la parte derecha y que sube unos 100 metros hacia otro tramo de vías. A partir de ahí todo el camino es sobre las vías, y no tiene absolutamente ninguna pérdida.
El camino suele durar unas 2 horas a paso normal, pero nosotros nos demoramos media hora más por ser de noche. Finalmente a las 22:30 llegamos a Aguas Calientes bastante cansados del día de viaje. Como no teníamos reservada una habitación, preguntamos en un par de hostales y, sin pensárnoslo demasiado, nos quedamos en uno de ellos por 60 soles la noche.
Hay que descansar que mañana subimos Machu Picchu!!
DÍA 11: MACHUPICCHU Y REGRESO A CUSCO
A las 4:15 de la mañana suena el despertador y, con mucha pereza pero con mucha emoción, nos levantamos de la cama, tomamos una ducha y decidimos darnos el pequeño lujo de subir a las ruinas en bus. Relamente no consideramos que el esfuerzo merezca la pena; he pasado mala noche con las tripas y me encuentro algo cansada, así que preferimos ahorrarnos el esfuerzo.
Respecto a la entrada de Machu Picchu, nosotros cometimos un pequeño fallo que querríamos comentar. Las cogimos con 3 meses de antelación en la página oficial, pero pensábamos que se pagaban allí. Estando en Cusco, fuimos a preguntar a la oficina de turismo y nos indicaron el lugar donde se venden las entradas para Machu Picchu. Allí nos dijeron que las reservas hay que pagarlas en un plazo de 3 horas desde que se hacen, por lo que las nuestras estaban anuladas.
No obstante, no tuvimos problema para cogerlas allí, aun siendo temporada alta. Eso sí, no quedaban entradas para Huayna Picchu, ya que únicamente pueden subir 400 personas por día, si mal no recuerdo, y eso sí que se llena pronto.
La entrada para Machu Picchu cuesta 142 soles por persona (unos 39 euros). Con Huayna Picchu cuesta algo más.
Para llegar a las ruinas caminando, hay que retroceder un kilómetro desde el pueblo, tomar una pista y seguirla hasta llegar a la entrada, o bien tomar pequeños atajos bastante picos.
Para subir en bus y ver el amanecer arriba, hay que madrugar, hacer una cola de mucha gente y pagar 12,5 dólares por un trayecto de 20 minutos en bus.
Así pues, a las 6:20 nos encontrábamos a las puertas de la entrada a Machu Picchu, con una larga cola para entrar a las ruinas. En media hora estábamos dentro del recinto. Tal y como nos recomendaron, nada más entrar subimos por unas escaleras que hay a mano izquierda y aparecimos en el lugar con una de las mejores vistas de las ruinas incas. Deleitamos el momento, porque iba a ser único.
En ese lugar pasamos las mejores dos horas del día, disfrutando del paisaje y de la magia del lugar, con muy poquita gente. Parecerá una tontería, pero es el mejor momento para disfrutar del lugar, porque en ese momento la gente está subiendo hacia la Montaña o hacia Huayna Picchu, y también hay muchísima gente que sube tarde a las ruinas, por lo que se está agusto sin masificaciones. También para la gente que quiera aprovechar para sacar unas buenas fotos, es el momento perfecto.
Machu Picchu y el paisaje que lo rodea es impresionante; una vez más, no tengo palabras. Hay que vivirlo.
A partir de las 9:00 comienza a entrar mucha gente, por lo que optamos por volver a la entrada y coger un guía para que nos explique la historia de este rincón del mundo tan especial.
El guía nos pone precio amigo y nos cobra 30 soles por los dos, por una hora y media en grupo de explicaciones sobre el lugar. Realmente recomendamos coger un guía para visitar Machu Picchu. Nos pareció muy interesante y nos gustó mucho el enfoque con el que nos retrató la cultura y la sociedad inca. Máximo respeto y veneración a su cultura, y como no, a la Madre Tierra o Pachamama en quechua.
Hay tanta información por Internet, que no voy a explicar nada en este blog acerca de este lugar. Creo más que justificado informarse sobre su historia y por supuesto, si se tiene la oportunidad, visitarlo con el mayor respeto que se merece un lugar tan sagrado.
A pesar de que nos da mucha pena, a las 12:00 decidimos despedirnos de este paisaje y, poco a poco, ir bajando para iniciar el trayecto de vuelta por las vías del tren. Queremos llegar para dormir a Cusco.
Decidimos bajar caminando, así que en unos 45 minutos cogiendo los atajos, llegamos a la entrada del pueblo. Una vez en las vías, paramos a reponer fuerzas y llenar el estómago y empezamos a caminar hacia la Hidro sin detenernos apenas.
Foto vías del tren
En dos horas a paso ligero estábamos allí de nuevo.
Nada más llegar, hay diferentes chóferes que te ofrecen la vuelta a Cusco directa. Optamos por uno que nos ofrece la vuelta por 65 soles por los dos (18 euros). Partimos con el coche lleno a las 15:30, y tras cinco horas y media, llegamos a Cusco para cenar algo y meternos en la cama.
DÍA 12: CUSCO-AREQUIPA
Después de unas cuantas horas de descanso en el mismo hostal en el que habíamos estado los días previos a Machu Picchu en Cusco, nos levantamos, desayunamos y preparamos todo ya que hoy nos marchamos rumbo a Arequipa. La sensación es rara, porque hemos estado muy agusto en Cusco y nos fastidia dejar esta ciudad, pero seguimos con la planificación que habíamos hecho.
Lo primero que hacemos es ir a un ciber a reservar el boleto de bus en Oltursa, pero al ser para el mismo día, no nos deja tramitarlo desde Internet. No nos queda otra que ir a la oficina en Cusco de Oltursa. Bajamos toda la Avenida del Sol hasta la estatua de Pachacútec, y nos topamos con la oficina. Compramos los billetes para esa noche y nos vamos hacia el museo de Qoricancha, ya que está incluido en el boleto turístico que compramos para ver el Valle Sagrado. El museo es interesante, y permite conocer más sobre la culutra y la sociedad inca. Pasamos más de una hora en este lugar, y tras ello nos vamos a comer algo.
Por la tarde aprovechamos para visitar el mercado de San Pedro, que todavía no habíamos tenido tiempo de ver, y compramos algún detallico para llevar a familia y amigos/as. Pronto volvemos al hostal para recoger las mochilas y nos vamos hacia la estación de buses. Puntuales tomamos el bus rumbo a Arequipa, nuestra tercera y penúltima etapa.
DÍA 13: AREQUIPA
El viaje nocturno a Arequipa ha durado más de lo previsto (16 horas concretamente), porque la nieve nos ha tenido unas 4 horas parados sin poder avanzar. Así pues, nuestro plan de coger el tour de 3 días al Colca se cancela. Llegamos a la Terminal Terrestre de Arequipa pasadas las 12:00 p.m., por lo que lo único que nos queda es ir a buscar un hostel y visitar la ciudad. Nuestra idea es ir caminando hasta el centro, ya que en la guía pone que hay unos 15 minutos aproximadamente, pero cuando lo preguntamos, nos dicen que hay por lo menos 1 hora caminando, así que por 7 soles tomamos un taxi hasta la ciudad. Después de ver varios hosteles, nos quedamos en La Compañía B&B, que nos hace un precio especial. Como ya son las 14:00h, salimos a comer algo. A las 15:00h vamos al punto de encuentro del Free Tour, pero los dos grupos que hay son en inglés !increíble!, así que nos marchamos a dar una vuelta y preguntar en alguna agencia información para hacer el tour al Colca. Hay distintas opciones para visitarlo:
1) Full day: te recogen a las 3:00 a.m. y se visita Chivay hasta la Cruz del Cóndor y vuelta a Arequipa. Desde Arequipa a Chivay hay unas 3 horas en coche/combi/bus, y desde allí hasta la Cruz del Cóndor unos 90 minutos aproximadamente.
2) Dos días: esta excursión tiene dos opciones:
a) Trekking Arequipa-Chivay-Cabanaconde: a las 3:00 am se sale de Arequipa. Desde Cabanaconde parte el trekking de 6 horas de bajada hasta el Oasis, en donde se hace noche. Te despiertan a las 5:00 am para subir hacia la Cruz del Cóndor (3 horas). Allí de ven los cóndores y después se toma bus/combi de nuevo a Arequipa.
b) Convencional: Arequipa-Chivay (sale a las 8:00 am). Se para por pueblos y miradores (3 horas de viaje) y se alcanzan los 4900 msnm. Se visitan las aguas termales de Chivay y se pasa la noche en la ciudad. A las 6:30 am, se sale hacia la Cruz del Cóndor. La combi te deja en un punto cercano desde el que hay que caminar 50 minutos en un paseo agradable por el Cañón. Cuando llegas, puedes ver cóndores y poco después se parte de nuevo hacia Arequipa.
3) Tour de 3 días: se parte desde Arequipa hasta Chivay. Allí se visitan las termas y se pasa la noche. Desde Chivay se va hasta Cabanaconde. Se pasa la noche en el Oasis y temprano se sale hacia la Cruz del Cóndor caminando. Al terminar, se vuelve a Arequipa.
En un primer momento, nosotros teníamos intención de contratar el tour de 2 días, pero estamos cansados de las etapas de Huaraz y Cusco y el viaje nos empieza a pesar, así que optamos por el tour convencional, pero no muy convencidos. Nos cuesta en total 150 soles para los dos, incluyendo hostel, transporte y guía y excluyendo entradas al Colca, entradas a las termas y comidas.
Con el plan hecho, nos acostamos pronto para cargar pilas para los dos siguientes días de visita al Cañón del Colca.
DÍA 14: AREQUIPA-CAÑÓN DEL COLCA
A las 7:30 am hemos quedado en la Plaza de Armas para que nos recoja la combi, así que preparamos una mochila con lo imprescindible, nos damos una ducha, desayunamos y vamos al encuentro. Recogemos a distintos pasajeros y ponemos rumbo a Chivay. Hacemos diferentes paradas en el trayecto para ver vicuñas, alpacas y llamas, y también paramos en el mirados de los volcanes.
Antes de coger altura, nos paran para tomar un mate de coca, En tres horas llegamos al pueblo de Chivay, donde nos paran en un restaurante buffet antes de llevarnos al hostel. Nosotros, junto con otra pareja arequipeña, buscamos un sitio más económico donde comer y lo encontramos sin problema. Cuarenta minutos después nos montamos de nuevo en la combi, que nos lleva hasta el hostel. Hay personas que, en vez de quedarse en Chivay, optan por el cercano pueblo de Yanque. Chivay es un pueblito bastante feo que no tiene ningún atractivo o lugar de interés para visitar; es un pueblo de paso para quienes visitan el Valle del Colca. Una hora después, nos recogen para llevarnos a las termas. Intentamos que nos lleven a las de Yanque, porque tenemos entendido que son más naturales, pero nos posible. Vamos entonces a las termas de Chivay. Nuestra primera impresión es de decepción, porque se trata de dos piscinas artificiales, con agua termal que bombean desde el río. Bajamos al río para intentar buscar un lugar más natural en el que estar, pero no es nada agradable; hay zonas donde el agua está hirviendo y otras donde el agua está helada; no hay -o no encontramos- una zona donde el agua esté a buena temperatura. Así pues, subimos de nuevo a la piscina e intentamos disfrutar. El agua está muy caliente y pasamos un buen rato con Kelly y Jorge, la apreja arequipeña con la que hemos comido. Ellos nos dicen que después el tour está organizado para llevarnos a un restaurante donde, además de cenar, habrá un espectáculo de la danza watiti (danza del enamoramiento, típica de la zona y declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad), es decir, una turistada con todas las letras.
Ander y yo estamos bastante rallados con esta etapa, decepcionados. Viendo que tampoco tenemos ningún plan alternativo y que estamos aburridos, valoramos y decidimos ir -por lo menos, disfrutaremos de la buena compañía de Kelly y Jorge-, aunque seamos parte de la turistada que tantas veces evitamos.
Así pues, a las 19:30 pm nos recogen para ir a cenar. Por lo menos, nos hacen al grupo un precio especial y por 18 soles comemos un plato de comida típica peruana. Cenamos muy bien, la verdad. Música y danza en directo. Lo pasamos bien. A las 21:00h nos llevan de nuevo al hostel. Hace bastante frío, así que nos metemos en la cama y a descansar.
DÍA 15: CAÑÓN DEL COLCA-AREQUIPA-VIAJE A ICA
A las 5:30 am amanecemos, nos damos una ducha, desayunamos en el hostel y a las 6:10 nos recogen puntualmente. Pasamos a recoger a las otras personas que hacen el tour y nos vamos hacia Yanque. Allí nos volvemos a encontrar con la pareja de sorianos que conocimos ayer, que practicamente acaban de empezar su viaje y compartimos experiencias.
En Yanque hacemos una parada -nuevamente otra turistada- para ver la danza del Watiti y hacer foto con rapaces y con alpacas en la plaza de Armas. Tratamos de no formar parte de ello y estamos a nuestro aire con la pareja de sorianos.
Después de 30 minutos, ponemos rumbo hacia la Cruz del Cóndor y llegamos en unos 50 minutos al punto más cercano a partir del cual debemos caminar por el Cañón hasta llegar a la cruz. En el trayecto la guía nos cuenta algunas cosas y ya empezamos a ver los primeros cóndores. Esto sí que nos sorprende porque habíamos leído en foros y blogs que habitualmente no se ven... Y nosotros vemos varios y muy de cerca.
Le preguntamos a la guía lo inevitable e intuible: si les echan comida para que estén cerca y los turistas los puedan ver y nos responde que "a veces sí". Está clarísimo que les echan carroña y es... lamentable. Todo para que los turistas vayamos y así no se les acabe el negocio. La mano del ser humano, una vez más, forzando a la naturaleza para el disfrute absurdo. La naturaleza nos lo cobrará en algún momento.
Después de esto, nos ponemos en marcha hacia Chivay haciendo diferentes paradas y llegando sobre las 12:00h, donde paramos nuevamente al buffet. Una vez más, junto con los arequipeños con los que hemos hecho muy buenas migas, buscamos un sitio más económico para comer y lo encontramos por 10 soles.
Un rato después montamos de nuevo en la combi para volver a Arequipa y en aproximadamente tres horas llegamos a la ciudad. Nos despedimos con pena de la pareja arequipeña pasándonos los contactos y, para hacer tiempo hasta la hora del bus, nos vamos a un ciber a conectarnos con el mundo exterior. Pasado un rato decidimos ir a la estación de buses y esperara allí. A las 20:30h nos montamos en el bus rumbo a Ica. La etapa en el Colca ha sido más decepcionante de lo esperado, pero hemos pasado momentos buenos en buena compañía.
DÍA 16: ICA-HUACACHINA
A las 9:00 am, puntuales, llegamos a la ciudad de Ica. La primera impresión es mala; una ciudad fea, a medio construir y con un entorno muy árido. Asumimos que estamos en el puro desierto!! Definitivamente Perú es tierra de grandes contrastes, y de gran riqueza!
Cansados del viaje, buscamos un hostel para alojarnos los dos próximos días que pasaremos en la ciudad. No vemos mucho hotel y, después de un rato buscando, encontramos el Palacio del Sol, por 60 soles la doble y nos quedamos sin dudarlo. Es el sitio más "lujoso" en el que hemos estado en todo el viaje!
Después de una necesaria ducha, salimos a dar una vuelta e informarnos sobre las excursiones a Huacachina, Islas Ballestas y Paracas. La ciudad, ahora, nos parece distinta, mucho mejor que por la mañana. En una de las miles de agencias que hay en la Plaza de Armas preguntamos sobre la excursión a Ballestas y Paracas. La de la agencia nos ofrece las dos excursiones por 180 soles (90 soles por persona Huacachina, Islas Ballestas y Reserva Nacional de Paracas). Nos ofrece gratis el city tour por Ica para es mismo día, pero teniendo en cuenta que son las 12:30 pm y el city tour empieza a las 13:00h, decidimos rechazarlo y quedamos para las 16:00h para ir a la Huacachina.
Así pues, comemos tranquilos y a las 16:00h acudimos al punto de encuentro (a estas alturas ya sabréis que es la Plaza de Armas). El viaje desde Ica hasta Huacachina apenas dura unos 30 minutos y, nada más llegar, ya vemos las dunas a nuestro frente.
Antes de coger el buggie, nos dan 25 minutos para visitar el Oasis con la laguna. Una vez más decepcionados con el entorno, con construcciones al pie de la laguna, que desmerecen y desvirtuan un entorno que, sin todo esto, podría ser idílico. Una pena.
A las 17:00h nos montamos en el buggie...
El trayecto en buggie por las dunas apenas dura una hora, pero está muy bien, es curioso y sueltas adrenalina. Entorno desértico 100%... espectacular!!!
A mitad del trayecto el conductor te para para que te puedas tirar por las dunas con una tabla de snow. Turistada 100%, pero de las que merecen la pena.
A las 18:30h llegamos de vuelta a la Plaza de Armas de Ica. Cogemos algo para cenar y nos metemos pronto a la cama que mañana madrugaremos.
DÍA 17: ICA-ISLAS BALLESTAS-RESERVA NACIONAL DE PARACAS
A las 6:45 pasan a recogernos por el hotel y en cosa de 1 hora y cuarto llegamos al pueblo de Paracas para salir en lancha hacia Islas Ballestas. Gracias a la recomendación de los sorianos, nos colocamos a la izquierda del barco y resulta ser todo un acierto ya que todo lo que se ve queda en el lado izquierdo y podemos hacer buenas fotos.
Lo primero que se ve es el famoso candelabro, que ha generado numerosas leyendas o teorías (extraterrestres, masones, incas,...). Perdura porque no es un dibujo sobre arena, sino que es pura roca; el guía nos dijo que, como en esa zona nunca llueve, el dibujo no se ha erosionado y perdura casi intacto.
Después empiezas a ver muchas aves (pelícanos, garzas, buitres, etc.), pingüinos y, por último, leones marinos. Todo el entorno, la isla, está completamente virgen, por lo que parece que estás viendo un documental de The National Geographic, pero en vivo y en directo. El paseo dura 1 hora y media aproximadamente.
Después del paseo en barca, nos montamos de nuevo en la combi para ir hacia la Reserva Nacional de Paracas. Hacemos distintas paradas y el guía nos va explicando diversas cosas sobre el lugar, siendo muy interesante la visita.
El paisaje es muy árido y, a su vez, muy colorido.
Una vez terminada la visita, regresamos a la ciudad de Ica, donde pasamos la noche y, al día siguiente, tomamos un bus que nos lleva a Lima para coger el vuelo de regreso a Madrid.
Puesto que Machu Picchu es el atractivo principal del Valle Sagrado, muchas de las ruinas que forman parte del Valle Sagrado son menos frecuentadas y se toman como parte del camino hacia MaPi. Y es una pena, porque Ollantaytambo es una zona arqueológica impresionante que bien merece dedicarle unas horas como mínimo.
Ollantaytambo toma su nombre de Ollantay (general del imperio inca) y tambo (en quechua, lugar de descanso, reposo).
En época de los incas, Ollantaytambo estaba formada por dos zonas: el pueblo, que es donde vivía la gente (el pueblo), y la fortaleza -que conforma la zona arqueológica- donde transcurría la vida religiosa, política, militar y administrativa de todo el pueblo. Esta era la zona más importante y la que estaba destinada a dar residencia al grupo social más alto de la clase inca.
Cualquier persona que observe cualquier construcción inca, se dará cuenta de que éstas están perfectamente adaptadas al entorno en el que están edificadas, en armonía con la naturaleza y respetando el equilibrio natural.
Los incas creían que las montañas tenían espíritu (Apus) y, en vez de romper ese equilibrio natural, construían sus fortalezas adaptando su arquitectura a la forma natural de las montañas.
Ollantaytambo es un ejemplo de ello.
Una vez visitada la fortaleza, volvimos al pueblo con intención de salir cuanto antes hacia Santa María y comenzar el trayecto a Aguas Calientes. Sabíamos que llevábamos el tiempo muy justo, pero teníamos la esperanza de no tener que caminar demasiado tiempo de noche.
Antes de seguir con esta etapa, voy a hacer un inciso para explicar el trayecto hacia Machu Picchu.
Para llegar a Aguas Calientes no hay demasiadas opciones, ya que el pueblo no tiene conexiones terrestres (salvo la ferroviaria): o bien tomas el tren que te lleva directo hasta el pueblo, o haces la ruta alternativa que implica varios trasnportes y una pequeña caminata. También hay muchas personas que hacen el llamado Camino Inca (uno de los muchos que hay) y va caminando desde Cusco hasta Aguas Calientes en una etapa que dura 4 días y 3 noches. No tengo demasiada información sobre esta ruta, pero tengo entendido que se puede hacer por libre o contratada con un guía. La excursión con guía creo recordar que era muy costosa y hay que reservarla con mucha antelación porque está muy demandada.
- La primera opción (tren) es la más cómoda, pero también la menos económica. El tren hacia Aguas Calientes sale desde Cusco (época seca) y desde Ollantaytambo (época lluviosa), y tiene un coste aproximado de 130 dólares (ida y vuelta). La mayoría de gente opta por el tren, pero hemos de decir que cada vez tiene más empuje la ruta alternativa. También hemos de decir que, según nos comentaron los locales, las empresas que gestionan y tienen el monopolio de realizar los viajes a Aguas Calientes, son de propiedad americana (cómo no). Han montado las vías del tren y, si quieres ir, debes pagar el precio que ellos ponen, ya que no existe ningún otro modo de acceder hasta el mismo pueblo. No olvidéis que el trayecto desde Ollantaytambo hasta Aguas Calientes no dura más de 2 horas y el precio es abusivo.
- La segunda opción es mucho más incómoda y engorrosa, pero tiene su encanto y el coste es considerablemente menor que el del pasaje del tren. La ruta tiene varios pasos:
1. Cusco-Ollantaytambo: tomas una combi.
2. Ollantaytambo-Santa María: combi o bus.
3. Santa María-Santa Teresa: jeep
4. Santa Teresa-Hidroeléctrica: taxi o combi.
5. Hidroeléctrica-Aguas Calientes: caminando por las vías del tren.
A pesar de que, como vais a ver a continuación, nosotros lo hicimos paso a paso, tomando distintos transportes, queremos destacar que existe la posibilidad de hacerlo en dos pasos: tomar un bus desde Cusco hasta la Hidro y desde allí caminar por las vías del tren. Nosotros no lo sabíamos, pero ahora las agencias turísticas están ofreciendo este trayecto en bus; también puedes negociar con un taxista y acordar un precio razonable para que te lleve hasta la Hidro.
Una vez explicado esto, sigo con el relato del diario, que muestra cómo hicimos el camino hacia Aguas Calientes por la llamada ruta alternativa.
Una vez visitada la fortaleza, volvemos al pueblo para tomar una combi hacia Santa María. Para ello, preguntamos a los/as locales cómo y dónde tomar la combi, y nos informan de que debemos ir hacia la salida del pueblo, en el cruce entre las vías del tren y la carretera que va hacia Quillabamba.
Tras una hora de espera sin que pase ninguna combi, nos empieza a apretar el tiempo. A las 15:00 pasa una que nos ofrece llevarnos, así que sin dudarlo nos montamos. El camino es incómodo; hay que cruzar un valle, y para ello debemos subir y bajar un montarrón alcanzando los 4200 metros de altitud. La carretera no invita a la tranquilidad: curvas y pendiente más que considerable. El paisaje, una vez más, espectacular; paso radical de paisaje árido a selvático.
Dos horas y media después nos presentamos en Santa María sanos y salvos y, sin perder tiempo (ya es de noche), compramos palta, fruta y pan y tomamos una combi hacia Santa Teresa con duración de una hora.
Una vez en Santa María, los taxistas nos comentan que, al ser de noche, no queda transporte público que vaya hacia la Hidro, por lo que nos nos queda otra que aceptar la tarifa que nos ponen. Tenemos la suerte de poder compartir el viaje con otra pareja chilena que también va para la Hidro.
En media hora nos presentamos en la Central Hidroeléctrica dispuestos a realizar el último tramo para llegar a Aguas Calientes: el camino de dos horas por las vías del tren.
Pese a ser de noche, no hay mayor problema en hacer el trayecto. El tren no circula de noche y el camino es cómodo; únicamente se trata de seguir las vías del tren. Importante llevar una forntal, porque hay algunos pasos en el camino en los que cruzas un pequeño río.
El trayecto empieza en las mismas vías pero, tras caminar unos 200 metros, éstas se acaban y hay que coger un sendero marcado en la parte derecha y que sube unos 100 metros hacia otro tramo de vías. A partir de ahí todo el camino es sobre las vías, y no tiene absolutamente ninguna pérdida.
El camino suele durar unas 2 horas a paso normal, pero nosotros nos demoramos media hora más por ser de noche. Finalmente a las 22:30 llegamos a Aguas Calientes bastante cansados del día de viaje. Como no teníamos reservada una habitación, preguntamos en un par de hostales y, sin pensárnoslo demasiado, nos quedamos en uno de ellos por 60 soles la noche.
Hay que descansar que mañana subimos Machu Picchu!!
DÍA 11: MACHUPICCHU Y REGRESO A CUSCO
A las 4:15 de la mañana suena el despertador y, con mucha pereza pero con mucha emoción, nos levantamos de la cama, tomamos una ducha y decidimos darnos el pequeño lujo de subir a las ruinas en bus. Relamente no consideramos que el esfuerzo merezca la pena; he pasado mala noche con las tripas y me encuentro algo cansada, así que preferimos ahorrarnos el esfuerzo.
Respecto a la entrada de Machu Picchu, nosotros cometimos un pequeño fallo que querríamos comentar. Las cogimos con 3 meses de antelación en la página oficial, pero pensábamos que se pagaban allí. Estando en Cusco, fuimos a preguntar a la oficina de turismo y nos indicaron el lugar donde se venden las entradas para Machu Picchu. Allí nos dijeron que las reservas hay que pagarlas en un plazo de 3 horas desde que se hacen, por lo que las nuestras estaban anuladas.
No obstante, no tuvimos problema para cogerlas allí, aun siendo temporada alta. Eso sí, no quedaban entradas para Huayna Picchu, ya que únicamente pueden subir 400 personas por día, si mal no recuerdo, y eso sí que se llena pronto.
La entrada para Machu Picchu cuesta 142 soles por persona (unos 39 euros). Con Huayna Picchu cuesta algo más.
Para llegar a las ruinas caminando, hay que retroceder un kilómetro desde el pueblo, tomar una pista y seguirla hasta llegar a la entrada, o bien tomar pequeños atajos bastante picos.
Para subir en bus y ver el amanecer arriba, hay que madrugar, hacer una cola de mucha gente y pagar 12,5 dólares por un trayecto de 20 minutos en bus.
Así pues, a las 6:20 nos encontrábamos a las puertas de la entrada a Machu Picchu, con una larga cola para entrar a las ruinas. En media hora estábamos dentro del recinto. Tal y como nos recomendaron, nada más entrar subimos por unas escaleras que hay a mano izquierda y aparecimos en el lugar con una de las mejores vistas de las ruinas incas. Deleitamos el momento, porque iba a ser único.
En ese lugar pasamos las mejores dos horas del día, disfrutando del paisaje y de la magia del lugar, con muy poquita gente. Parecerá una tontería, pero es el mejor momento para disfrutar del lugar, porque en ese momento la gente está subiendo hacia la Montaña o hacia Huayna Picchu, y también hay muchísima gente que sube tarde a las ruinas, por lo que se está agusto sin masificaciones. También para la gente que quiera aprovechar para sacar unas buenas fotos, es el momento perfecto.
Machu Picchu y el paisaje que lo rodea es impresionante; una vez más, no tengo palabras. Hay que vivirlo.
A partir de las 9:00 comienza a entrar mucha gente, por lo que optamos por volver a la entrada y coger un guía para que nos explique la historia de este rincón del mundo tan especial.
El guía nos pone precio amigo y nos cobra 30 soles por los dos, por una hora y media en grupo de explicaciones sobre el lugar. Realmente recomendamos coger un guía para visitar Machu Picchu. Nos pareció muy interesante y nos gustó mucho el enfoque con el que nos retrató la cultura y la sociedad inca. Máximo respeto y veneración a su cultura, y como no, a la Madre Tierra o Pachamama en quechua.
Hay tanta información por Internet, que no voy a explicar nada en este blog acerca de este lugar. Creo más que justificado informarse sobre su historia y por supuesto, si se tiene la oportunidad, visitarlo con el mayor respeto que se merece un lugar tan sagrado.
A pesar de que nos da mucha pena, a las 12:00 decidimos despedirnos de este paisaje y, poco a poco, ir bajando para iniciar el trayecto de vuelta por las vías del tren. Queremos llegar para dormir a Cusco.
Decidimos bajar caminando, así que en unos 45 minutos cogiendo los atajos, llegamos a la entrada del pueblo. Una vez en las vías, paramos a reponer fuerzas y llenar el estómago y empezamos a caminar hacia la Hidro sin detenernos apenas.
Foto vías del tren
En dos horas a paso ligero estábamos allí de nuevo.
Nada más llegar, hay diferentes chóferes que te ofrecen la vuelta a Cusco directa. Optamos por uno que nos ofrece la vuelta por 65 soles por los dos (18 euros). Partimos con el coche lleno a las 15:30, y tras cinco horas y media, llegamos a Cusco para cenar algo y meternos en la cama.
DÍA 12: CUSCO-AREQUIPA
Después de unas cuantas horas de descanso en el mismo hostal en el que habíamos estado los días previos a Machu Picchu en Cusco, nos levantamos, desayunamos y preparamos todo ya que hoy nos marchamos rumbo a Arequipa. La sensación es rara, porque hemos estado muy agusto en Cusco y nos fastidia dejar esta ciudad, pero seguimos con la planificación que habíamos hecho.
Lo primero que hacemos es ir a un ciber a reservar el boleto de bus en Oltursa, pero al ser para el mismo día, no nos deja tramitarlo desde Internet. No nos queda otra que ir a la oficina en Cusco de Oltursa. Bajamos toda la Avenida del Sol hasta la estatua de Pachacútec, y nos topamos con la oficina. Compramos los billetes para esa noche y nos vamos hacia el museo de Qoricancha, ya que está incluido en el boleto turístico que compramos para ver el Valle Sagrado. El museo es interesante, y permite conocer más sobre la culutra y la sociedad inca. Pasamos más de una hora en este lugar, y tras ello nos vamos a comer algo.
Por la tarde aprovechamos para visitar el mercado de San Pedro, que todavía no habíamos tenido tiempo de ver, y compramos algún detallico para llevar a familia y amigos/as. Pronto volvemos al hostal para recoger las mochilas y nos vamos hacia la estación de buses. Puntuales tomamos el bus rumbo a Arequipa, nuestra tercera y penúltima etapa.
DÍA 13: AREQUIPA
El viaje nocturno a Arequipa ha durado más de lo previsto (16 horas concretamente), porque la nieve nos ha tenido unas 4 horas parados sin poder avanzar. Así pues, nuestro plan de coger el tour de 3 días al Colca se cancela. Llegamos a la Terminal Terrestre de Arequipa pasadas las 12:00 p.m., por lo que lo único que nos queda es ir a buscar un hostel y visitar la ciudad. Nuestra idea es ir caminando hasta el centro, ya que en la guía pone que hay unos 15 minutos aproximadamente, pero cuando lo preguntamos, nos dicen que hay por lo menos 1 hora caminando, así que por 7 soles tomamos un taxi hasta la ciudad. Después de ver varios hosteles, nos quedamos en La Compañía B&B, que nos hace un precio especial. Como ya son las 14:00h, salimos a comer algo. A las 15:00h vamos al punto de encuentro del Free Tour, pero los dos grupos que hay son en inglés !increíble!, así que nos marchamos a dar una vuelta y preguntar en alguna agencia información para hacer el tour al Colca. Hay distintas opciones para visitarlo:
1) Full day: te recogen a las 3:00 a.m. y se visita Chivay hasta la Cruz del Cóndor y vuelta a Arequipa. Desde Arequipa a Chivay hay unas 3 horas en coche/combi/bus, y desde allí hasta la Cruz del Cóndor unos 90 minutos aproximadamente.
2) Dos días: esta excursión tiene dos opciones:
a) Trekking Arequipa-Chivay-Cabanaconde: a las 3:00 am se sale de Arequipa. Desde Cabanaconde parte el trekking de 6 horas de bajada hasta el Oasis, en donde se hace noche. Te despiertan a las 5:00 am para subir hacia la Cruz del Cóndor (3 horas). Allí de ven los cóndores y después se toma bus/combi de nuevo a Arequipa.
b) Convencional: Arequipa-Chivay (sale a las 8:00 am). Se para por pueblos y miradores (3 horas de viaje) y se alcanzan los 4900 msnm. Se visitan las aguas termales de Chivay y se pasa la noche en la ciudad. A las 6:30 am, se sale hacia la Cruz del Cóndor. La combi te deja en un punto cercano desde el que hay que caminar 50 minutos en un paseo agradable por el Cañón. Cuando llegas, puedes ver cóndores y poco después se parte de nuevo hacia Arequipa.
3) Tour de 3 días: se parte desde Arequipa hasta Chivay. Allí se visitan las termas y se pasa la noche. Desde Chivay se va hasta Cabanaconde. Se pasa la noche en el Oasis y temprano se sale hacia la Cruz del Cóndor caminando. Al terminar, se vuelve a Arequipa.
En un primer momento, nosotros teníamos intención de contratar el tour de 2 días, pero estamos cansados de las etapas de Huaraz y Cusco y el viaje nos empieza a pesar, así que optamos por el tour convencional, pero no muy convencidos. Nos cuesta en total 150 soles para los dos, incluyendo hostel, transporte y guía y excluyendo entradas al Colca, entradas a las termas y comidas.
Con el plan hecho, nos acostamos pronto para cargar pilas para los dos siguientes días de visita al Cañón del Colca.
DÍA 14: AREQUIPA-CAÑÓN DEL COLCA
A las 7:30 am hemos quedado en la Plaza de Armas para que nos recoja la combi, así que preparamos una mochila con lo imprescindible, nos damos una ducha, desayunamos y vamos al encuentro. Recogemos a distintos pasajeros y ponemos rumbo a Chivay. Hacemos diferentes paradas en el trayecto para ver vicuñas, alpacas y llamas, y también paramos en el mirados de los volcanes.
Antes de coger altura, nos paran para tomar un mate de coca, En tres horas llegamos al pueblo de Chivay, donde nos paran en un restaurante buffet antes de llevarnos al hostel. Nosotros, junto con otra pareja arequipeña, buscamos un sitio más económico donde comer y lo encontramos sin problema. Cuarenta minutos después nos montamos de nuevo en la combi, que nos lleva hasta el hostel. Hay personas que, en vez de quedarse en Chivay, optan por el cercano pueblo de Yanque. Chivay es un pueblito bastante feo que no tiene ningún atractivo o lugar de interés para visitar; es un pueblo de paso para quienes visitan el Valle del Colca. Una hora después, nos recogen para llevarnos a las termas. Intentamos que nos lleven a las de Yanque, porque tenemos entendido que son más naturales, pero nos posible. Vamos entonces a las termas de Chivay. Nuestra primera impresión es de decepción, porque se trata de dos piscinas artificiales, con agua termal que bombean desde el río. Bajamos al río para intentar buscar un lugar más natural en el que estar, pero no es nada agradable; hay zonas donde el agua está hirviendo y otras donde el agua está helada; no hay -o no encontramos- una zona donde el agua esté a buena temperatura. Así pues, subimos de nuevo a la piscina e intentamos disfrutar. El agua está muy caliente y pasamos un buen rato con Kelly y Jorge, la apreja arequipeña con la que hemos comido. Ellos nos dicen que después el tour está organizado para llevarnos a un restaurante donde, además de cenar, habrá un espectáculo de la danza watiti (danza del enamoramiento, típica de la zona y declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad), es decir, una turistada con todas las letras.
Ander y yo estamos bastante rallados con esta etapa, decepcionados. Viendo que tampoco tenemos ningún plan alternativo y que estamos aburridos, valoramos y decidimos ir -por lo menos, disfrutaremos de la buena compañía de Kelly y Jorge-, aunque seamos parte de la turistada que tantas veces evitamos.
Así pues, a las 19:30 pm nos recogen para ir a cenar. Por lo menos, nos hacen al grupo un precio especial y por 18 soles comemos un plato de comida típica peruana. Cenamos muy bien, la verdad. Música y danza en directo. Lo pasamos bien. A las 21:00h nos llevan de nuevo al hostel. Hace bastante frío, así que nos metemos en la cama y a descansar.
DÍA 15: CAÑÓN DEL COLCA-AREQUIPA-VIAJE A ICA
A las 5:30 am amanecemos, nos damos una ducha, desayunamos en el hostel y a las 6:10 nos recogen puntualmente. Pasamos a recoger a las otras personas que hacen el tour y nos vamos hacia Yanque. Allí nos volvemos a encontrar con la pareja de sorianos que conocimos ayer, que practicamente acaban de empezar su viaje y compartimos experiencias.
En Yanque hacemos una parada -nuevamente otra turistada- para ver la danza del Watiti y hacer foto con rapaces y con alpacas en la plaza de Armas. Tratamos de no formar parte de ello y estamos a nuestro aire con la pareja de sorianos.
Después de 30 minutos, ponemos rumbo hacia la Cruz del Cóndor y llegamos en unos 50 minutos al punto más cercano a partir del cual debemos caminar por el Cañón hasta llegar a la cruz. En el trayecto la guía nos cuenta algunas cosas y ya empezamos a ver los primeros cóndores. Esto sí que nos sorprende porque habíamos leído en foros y blogs que habitualmente no se ven... Y nosotros vemos varios y muy de cerca.
Le preguntamos a la guía lo inevitable e intuible: si les echan comida para que estén cerca y los turistas los puedan ver y nos responde que "a veces sí". Está clarísimo que les echan carroña y es... lamentable. Todo para que los turistas vayamos y así no se les acabe el negocio. La mano del ser humano, una vez más, forzando a la naturaleza para el disfrute absurdo. La naturaleza nos lo cobrará en algún momento.
Después de esto, nos ponemos en marcha hacia Chivay haciendo diferentes paradas y llegando sobre las 12:00h, donde paramos nuevamente al buffet. Una vez más, junto con los arequipeños con los que hemos hecho muy buenas migas, buscamos un sitio más económico para comer y lo encontramos por 10 soles.
Un rato después montamos de nuevo en la combi para volver a Arequipa y en aproximadamente tres horas llegamos a la ciudad. Nos despedimos con pena de la pareja arequipeña pasándonos los contactos y, para hacer tiempo hasta la hora del bus, nos vamos a un ciber a conectarnos con el mundo exterior. Pasado un rato decidimos ir a la estación de buses y esperara allí. A las 20:30h nos montamos en el bus rumbo a Ica. La etapa en el Colca ha sido más decepcionante de lo esperado, pero hemos pasado momentos buenos en buena compañía.
DÍA 16: ICA-HUACACHINA
A las 9:00 am, puntuales, llegamos a la ciudad de Ica. La primera impresión es mala; una ciudad fea, a medio construir y con un entorno muy árido. Asumimos que estamos en el puro desierto!! Definitivamente Perú es tierra de grandes contrastes, y de gran riqueza!
Cansados del viaje, buscamos un hostel para alojarnos los dos próximos días que pasaremos en la ciudad. No vemos mucho hotel y, después de un rato buscando, encontramos el Palacio del Sol, por 60 soles la doble y nos quedamos sin dudarlo. Es el sitio más "lujoso" en el que hemos estado en todo el viaje!
Después de una necesaria ducha, salimos a dar una vuelta e informarnos sobre las excursiones a Huacachina, Islas Ballestas y Paracas. La ciudad, ahora, nos parece distinta, mucho mejor que por la mañana. En una de las miles de agencias que hay en la Plaza de Armas preguntamos sobre la excursión a Ballestas y Paracas. La de la agencia nos ofrece las dos excursiones por 180 soles (90 soles por persona Huacachina, Islas Ballestas y Reserva Nacional de Paracas). Nos ofrece gratis el city tour por Ica para es mismo día, pero teniendo en cuenta que son las 12:30 pm y el city tour empieza a las 13:00h, decidimos rechazarlo y quedamos para las 16:00h para ir a la Huacachina.
Así pues, comemos tranquilos y a las 16:00h acudimos al punto de encuentro (a estas alturas ya sabréis que es la Plaza de Armas). El viaje desde Ica hasta Huacachina apenas dura unos 30 minutos y, nada más llegar, ya vemos las dunas a nuestro frente.
Antes de coger el buggie, nos dan 25 minutos para visitar el Oasis con la laguna. Una vez más decepcionados con el entorno, con construcciones al pie de la laguna, que desmerecen y desvirtuan un entorno que, sin todo esto, podría ser idílico. Una pena.
A las 17:00h nos montamos en el buggie...
El trayecto en buggie por las dunas apenas dura una hora, pero está muy bien, es curioso y sueltas adrenalina. Entorno desértico 100%... espectacular!!!
A mitad del trayecto el conductor te para para que te puedas tirar por las dunas con una tabla de snow. Turistada 100%, pero de las que merecen la pena.
A las 18:30h llegamos de vuelta a la Plaza de Armas de Ica. Cogemos algo para cenar y nos metemos pronto a la cama que mañana madrugaremos.
DÍA 17: ICA-ISLAS BALLESTAS-RESERVA NACIONAL DE PARACAS
A las 6:45 pasan a recogernos por el hotel y en cosa de 1 hora y cuarto llegamos al pueblo de Paracas para salir en lancha hacia Islas Ballestas. Gracias a la recomendación de los sorianos, nos colocamos a la izquierda del barco y resulta ser todo un acierto ya que todo lo que se ve queda en el lado izquierdo y podemos hacer buenas fotos.
Lo primero que se ve es el famoso candelabro, que ha generado numerosas leyendas o teorías (extraterrestres, masones, incas,...). Perdura porque no es un dibujo sobre arena, sino que es pura roca; el guía nos dijo que, como en esa zona nunca llueve, el dibujo no se ha erosionado y perdura casi intacto.
Después empiezas a ver muchas aves (pelícanos, garzas, buitres, etc.), pingüinos y, por último, leones marinos. Todo el entorno, la isla, está completamente virgen, por lo que parece que estás viendo un documental de The National Geographic, pero en vivo y en directo. El paseo dura 1 hora y media aproximadamente.
Después del paseo en barca, nos montamos de nuevo en la combi para ir hacia la Reserva Nacional de Paracas. Hacemos distintas paradas y el guía nos va explicando diversas cosas sobre el lugar, siendo muy interesante la visita.
El paisaje es muy árido y, a su vez, muy colorido.
Una vez terminada la visita, regresamos a la ciudad de Ica, donde pasamos la noche y, al día siguiente, tomamos un bus que nos lleva a Lima para coger el vuelo de regreso a Madrid.